CON LA LLEGADA DE LA SEMANA SANTA

La Asociación de Consumidores de Navarra «Irache» todos los años recibe un número importante de reclamaciones relativas al uso fraudulento de tarjetas de crédito en comercios y establecimientos. La Semana Santa y el verano son épocas en las que el uso de la tarjeta de crédito se multiplica, y los delincuentes aprovechan cualquier descuido para sustraer tarjetas de crédito y utilizarlas fraudulentamente. El cumplimiento de unas pautas mínimas de seguridad es fundamental y beneficia a consumidores, establecimientos, y entidades financieras.

 

¿Qué debe hacer el consumidor para evitar el uso fraudulento de la tarjeta?

 

Para limitar riesgos el consumidor debe seguir una serie de consejos:

 

– Firme la tarjeta nada más recibirla y no apunte el número secreto en ningún lugar.

– Si su entidad se lo permite, solicite que aparezca su foto en la tarjeta.

     

  • Apunte en el reverso de su tarjeta la expresión «pedir DNI». Aunque no nos libere de responsabilidad, ayudará a recordar al cajero que debe solicitarlo.

     

     

  • Antes de sacar dinero en un cajero compruebe que el cajero está libre de toda sospecha, observe a simple vista si carece de dispositivos u aparatos sospechosos. Al marcar el número secreto, oculte con una mano las teclas.

     

     

  • No tire los recibos de los cajeros o los justificantes de pago de las compras que efectuamos. Los datos que aparecen (nombre, número de tarjeta y fecha caducidad) pueden ser utilizados por terceras personas para efectuar compras a su costa por teléfono o a través de Internet.

     

     

  • Reduzca el número de tarjetas de crédito. Cancele las que son innecesarias, y lleve consigo sólo las que vaya a utilizar.

     

 

¿Qué debemos hacer en caso de pérdida, robo o uso fraudulento?

 

Si a pesar de nuestras precauciones perdemos o nos roban la tarjeta, debemos comunicarlo cuanto antes a la entidad emisora, para que la tarjeta sea inutilizada. Las entidades emisoras disponen de un teléfono de atención las 24 horas del día. Presente una denuncia ante la Policía, no sólo contribuirá a la captura de los delincuentes, sino que será necesaria para poder reclamar a la entidad financiera. Le recomendamos que una vez hechos estos trámites, acuda a su Banco y presente un escrito relatando lo sucedido, quedándose con una copia.

 

Le recordamos que, entre otros casos, no tendremos que hacer frente a los gastos:

1. – Cuando nos carguen el importe de un gasto realizado con nuestra tarjeta después de comunicar a la entidad bancaria su pérdida o robo.

2. – Cuando no exista comprobante de la compra realizada.

3. – Si la entidad nos envía una tarjeta no solicitada por un medio inadecuado (correo ordinario) tampoco tendremos que responder de los gastos ocasionados por su robo.

 

Recuerde además que existe una Recomendación de la Comisión Europea que establece que el titular de la tarjeta (el consumidor), hasta el momento de la notificación de la pérdida o robo de la tarjeta al Banco, asumirá los daños que se produzcan hasta el límite de 150 euros, excepto cuando haya actuado con negligencia grave, o de forma fraudulenta, en cuyo caso no se aplicará dicho límite.

 

Consejo a los consumidores

 

Además de mostrar siempre el D.N.I a la vez que se paga con tarjeta, existen entidades bancarias que permiten «personalizar» la tarjeta, incluyendo la fotografía del titular. Es una medida de seguridad muy efectiva, que en su día ya propuso «Irache».

 

Debemos concienciarnos de que si nos solicitan el carnet de identidad no es por desconfianza del establecimiento hacia nosotros, sino una medida que protege nuestro dinero.

 

Las medidas de seguridad

 

Los cajeros de los establecimientos comerciales deben seguir unas pautas de conducta para evitar el uso fraudulento de las tarjetas de crédito por personas no autorizadas.

 

1º – Solicitar el DNI al cliente cuando realiza una compra o adquiere un servicio.

 

2º- Comprobación de que la identidad del cliente coincide con el titular de la tarjeta, y que la firma del cliente en la tarjeta coincide con la del DNI.

 

3º- Es muy conveniente comprobar que el aspecto físico de la persona que presenta la tarjeta coincide con la fotografía del DNI, si bien es cierto que la apariencia de las personas puede variar en las fotos por el paso de los años.

 

Si estas medidas de seguridad se llevan a la práctica, el ladrón que tiene la tarjeta difícilmente podrá efectuar alguna compra con ella: deberá tener el DNI, tendrá que parecerse a la persona que aparece en la foto, y tendrá que firmar como el titular, ya que de lo contrario será descubierto. Y además, en algunas tarjetas necesitará el número secreto para actuar.

 

Los Tribunales han señalado que la exigencia de acreditación es la garantía para el consumidor de que no se permite el uso de la tarjeta a quien no es su legítimo titular.