IRACHE ACONSEJA ASEGURARSE DE LOS ACCESORIOS DEL DISFRAZ

By 26 diciembre, 2012 NOTICIAS, NOTICIAS DESTACADAS.

La Asociación de Consumidores de Navarra Irache, dada la costumbre en muchas localidades navarras de disfrazarse en Nochevieja, recomienda cerciorarse de los accesorios con los que cuenta el disfraz antes de comprarlo así como asegurarse de que éste se encuentra en perfectas condiciones.

En el estudio llevado a cabo a tal efecto, se han extraído las siguientes conclusiones:

Los precios varían bastante, si bien en su mayor parte se sitúan entre los veinte y los ochenta euros. Es muy importante que, antes de pagar, el consumidor se asegure de qué accesorios incluye el disfraz elegido ya que en ocasiones la imagen del catálogo puede dar lugar a equívocos. Por ello, el gasto puede ser mayor cuando, tras el disfraz, hay que comprar una serie de añadidos que elevan de forma sensible el coste. Así, un disfraz que requiera una peluca o calzado añadido puede suponer un pago añadido de veinticinco o treinta euros, sin necesidad de mirar los artículos más costosos.
 
Los disfraces más demandados, entre veinte y ochenta euros

La mayor parte de los disfraces se sitúan en unos precios que oscilan entre veinte y ochenta euros. Son los más utilizados puesto que la relación calidad-precio es asumible para la mayoría de los consumidores. Sin embargo, el coste sube si el disfraz es algo más sofisticado, por lo que muchos de ellos superan los cien euros. Si buscamos los más caros,  hay algún disfraz que se acerca a los mil euros de coste.

Diferente información en unos catálogos u otros

La mayor parte de comercios especializados ponen a disposición de los clientes catálogos con los disfraces a la venta y algunos tienen su propia página en internet para consultarlo en la red. Mientras que algunos catálogos incluyen como norma los accesorios, las tallas e incluso el número de unidades disponibles con las que cuentan, en otros no viene otra información que la foto del disfraz y el precio, sin que el consumidor pueda saber la talla o los añadidos incluidos en la compra.

Cabe destacar que en algunos de estos catálogos incluyen disfraces usados, que suponen una rebaja notable del precio respecto al disfraz nuevo. En cualquier caso, el consumidor debe saber que si no se especifica nada, se entiende que el disfraz ofrecido está para estrenar.

Darse prisa en comprobar que el disfraz está en buen estado

Es conveniente conservar el tique y comprobar el estado del disfraz cuanto antes -incluso preguntar si se puede probar en el establecimiento- para asegurarse de que está en buenas condiciones. No es extraño que el consumidor, al abrir el disfraz, en ocasiones el mismo día 31, compruebe que éste se encuentra dañado, la tela está rasgada o faltan accesorios. Aunque en muchas ocasiones los comercios no ponen objeción para cambiarlo, en otros sí puede haber problemas o el stock está agotado. Cuanto más tiempo pase desde la compra, más complicado será el cambio.

Cuidado con las devoluciones

En algunos comercios está expuesta la advertencia de que no se admiten devoluciones, principalmente con los accesorios que acompañan al disfraz. En este sentido, hay que asegurarse de que la compra responde a las expectativas del consumidor y, en cualquier caso, consultar las opciones de devolución que existen.

Los catálogos muestran en ocasiones ofertas con un precio tachado y otro actual con diferencias de hasta sesenta euros o descuentos de más del 50%. Lo más conveniente es no hace caso al supuesto precio anterior y valorar sólo si la oferta actual encaja dentro de la relación calidad-precio que el consumidor está dispuesto a aceptar.

El alquiler va a menos

Parece que el alquiler de disfraces disminuye con los años. Muchos comercios sólo exponen sus disfraces para la venta y no ofrecen la posibilidad del alquiler. En los establecimientos que alquilan disfraz, el precio del alquiler no suele estar indicado en el catálogo -que siempre muestra el precio de venta- y hay que hablar directamente con el encargado para establecer las condiciones.

En internet, considerar el plazo de entrega y el medio de pago

Algunos establecimientos con página web dan la posibilidad de realizar las compras en internet. Los precios del envío se sitúan entre ocho y diez euros y, en general, el tiempo de entrega no suele superar las 48 horas. En cualquier caso, lo importantes es asegurar las condiciones, adoptar medios de pago seguros y valorar si es más conveniente este medio de compra que acudir al establecimiento.

Otras opciones

Desde Irache también se propone tener en cuenta otras opciones, como las de elaborar el propio disfraz o utilizar -completa o parcialmente- los que se han llevado otros años para que el gasto de la fiesta de Nochevieja sea menor. No siempre es necesario gastar dinero para llevar un disfraz original.

Si se acude a un cotillón

Aquellas personas que han optado por acudir en Nochevieja a una fiesta de cotillón deben tener en cuenta las siguientes cuestiones:
– Los alimentos deben estar en perfecto estado para su consumo y la vajilla limpia. Si se produce alguna intoxicación alimentaria por algún alimento servido durante la fiesta -debería probarse-, el establecimiento debería indemnizar por los daños.
– Si se deja alguna prenda de vestir en el guardarropa del establecimiento conviene guardar la ficha o número que le den, puesto que si la prenda no aparece el establecimiento será responsable de la pérdida.
– Se debe exigir información clara y detallada sobre el menú incluido en el precio, para evitar sorpresas como que el menú sea de menor calidad, o el vino y las copas no estén incluidos.